VA CON FIRMA
A pesar de que el ministerio de Salud realizó un aumento del 6% en febrero, autorizó una nueva suba del 11%, desdoblada en julio y agosto.
El ministerio de Salud dispuso a través de la resolución 613-E/2017, el aumento de un 11% en la medicina prepaga que será desdoblado en un 6% en julio y un 5% en el mes de agosto.
La resolución lleva la firma del ministro Jorge Lemus, y plantea que el Gobierno analizó “las proyecciones de incremento de costos del sector” y considera “razonable autorizar un aumento de un 11% a partir del 1° de julio de 2017”.
Este es el segundo aumento planteado por el gobierno luego de una suba de un 6% anunciada en febrero. De este modo, los costos de las prepagas se elevan considerablemente. De hecho, en 2016, los incrementos acumulados arrojaron una suba general del 43,5%.
Según los últimos datos en relación a la distribución de los servicios de salud en Argentina entre 2009 y 2010 el 36% de la población no tiene cobertura médica de la seguridad social (PAMI y obras sociales sindicales) o privada (prepagas), y se atiende en hospitales y centros de salud públicos.
Según un informe de la consultora Key Market, en 2010 4.600.000 personas de poder adquisitivo medio o alto tenían prepaga, y gastaron en 2009 $12.807 millones.
Alrededor del 65% de los consumidores de medicina prepaga se encuentra en la Capital Federal, Gran Buenos Aires y las principales ciudades del país: Rosario, Santa Fe, Córdoba y Mendoza.
El mercado de la medicina prepaga viene creciendo sin pausa. La mayoría provienen de obras sociales, es decir que traen consigo sus aportes. Sin embargo, en muchos casos y en Mendoza particularmente, personas que aportan a la Obra Social de Empleados Públicos (OSEP) contratan aparte una medicina prepaga aunque no puedan desregular sus aportes, por el mal funcionamiento de la obra social, y los elevados montos que deben pagar en co-seguro.
Por otra parte, algunos en su época de actividad económica deciden contratar un servicio de medicina prepaga para mantener en su época de vejez, tratando de prevenir las dificultades que genera para una persona adulta tener PAMI, donde los turnos son asignados con demora, los médicos a menudo están colapsados, y sumado a esto, la quita de cobertura del 100% en medicamentos a aquellos sectores determinados por el actual gobierno.
Sin dudas el mercado de la prepaga crece, aunque con dificultades, y ya no es un servicio que sólo contratan las capas altas de la sociedad, sino que también se extiende a las clases medias, quienes se verán realmente perjudicadas a través de los aumentos excesivos que plantea el ministerio de Salud, ya que las clases medias se han visto fuertemente impactadas por las medidas de ajuste y tarifazos del gobierno de Cambiemos.